Consultoría y realidades

Visionar

VisionarMas allá de las propias ideas

Puede que la única conclusión posible sobre el desconcertante conflicto de paradigmas que nos rodea sea el asumir que, para la mayor parte de las incógnitas, no habrá un nuevo paradigma, sino “un espacio donde todos los outputs posibles son posibles… en un espacio de comunidades cambiantes”.

Es una buena noticia porque la vieja estructura encubría una falsa sensación de comodidad solo real para algunas (selectas) minorías.

Tal vez no estamos en época de cambio sino en esa nueva realidad de “posibles y cambiantes” en el que la estructura no necesita ser repensada sino liberada. Si todo es líquido como se dice, los cauces no sirven.

Y si algo nos está enseñando la capacidad de interactuar y compartir es que el proceso de reflexión-acción debe aprender de esta nueva dinámica de posibilidades porque incluso evitando la amenaza del pensamiento ininterrumpido, o sucumbiendo a la idealizada tentación del distanciamiento deliberado, tendemos a seguir pautas aprendidas difíciles de detectar en solitario.

Por otro lado, la ansiada desconexión que nos acerca al fluir interno impide ver que continuamos emitiendo señales que, a su vez, influyen en el contexto en el que pretendemos evolucionar. Escuchar y conversar son buenos mecanismos para coger perspectiva sobre lo que el cerebro recuerda pero mejor aún cuando alguien te señala “escucha lo que has dicho tú”

LaFraseDelDia_LauraIago

Si bien no debemos olvidar que «siempre vamos por detrás de aquellos cambios del entorno que despiertan la necesidad de que espabilemos», es importante saber evaluar tanto el conocimiento construido como el que vamos anticipando con más hechos que palabras.

En estos tiempos complejos cada cual camina como puede pero es cierto que ante las paredes no sirven las piedras, mejor ser caballo de Troya. El principal desafío lo llevamos dentro y hay quien, por no asumirlo, prefiere morir de vergüenza. Con su subrayado, Laura me recordó las palabras de Guy Claxton y esta escena de Anthony Hopkins.

Cuando las personas no se sienten equipadas para comprometerse con la complejidad, optan por cierto tipo de autoprotección. El riesgo es que la incapacidad de comprometerse con la incertidumbre –de arriesgarse con la incomprensión, de ser un aprendiz- sin sentir inseguridad o vergüenza, nos hace buscar seguridad en algún tipo de certeza prefabricada. Al carecer de la capacidad, el coraje y las armas para embarcarse en el viaje del aprendizaje, las personas pueden verse forzadas a encerrarse en cualquier leve fuente de seguridad en el presente.

«Por no hacer lo único que podía salvarles la vida» (0:32 m.)


Desafio Interno por enpalabras

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14 comentarios

  1. Hilando un poco más, el personaje de Hopkins en El Desafío tiene el fastidioso ánimo de sobrevivir (aquello que le decían a Bond en Octopussy), y todo por sus capacidades intelectuales. Vale, era un multimillonario que seguro que podía dedicar todo el tiempo del mundo para aprender disciplinas inútiles (hasta que le hizo falta saber cómo sobrevivir a un oso), pero no deja de ser el meollo de la película, y viniendo el texto de alguien como David Mamet, tan urbanita él, no creo que sea alejarse demasiado de las intenciones el considerar que planta ante la adversidad a alguien que tiene llaves para muchas puertas que estaban ahí, pero que no tenía necesidad de abrir. O sea, un poco el enfrentamiento en épocas de cambios.

    Si es que la ficción explica muy bien las cosas!

    1. «que tiene llaves para muchas puertas que estaban ahí, pero que no tenía necesidad de abrir»

      Redondo tu comentario. Tengo que volver a ver esta película, creo que le toca este fin de semana..

      Lo de el «fastidioso ánimo de sobrevivir» ¡me encanta!. Me lo quedo 😉

  2. «El principal desafío lo llevamos dentro y hay quien, por no asumirlo, prefiere morir de vergüenza». Esta frase te hace remover todo por dentro.

    Cada vez me gusta más la contextualización que haces con las pelis. Es muy pedagógico, te sugiere pero te deja libertad para analizar.

    1. Bueno, con esta se lució Iago más que yo, creo que su comentario, y ver de nuevo la peli, da pie para otro post.

      Pero tengo la impresión de que sobre pelis, protas y «pedagogías del hacer» vas a tener tú mucho que contar 🙂

  3. Bueno, pues ayer la vi y reconozco que me gustó mucho. Antes de nada, qué guay llegar a una peli así, a la que no creo que hubiera llegado de otra manera. Pero dejando al lado la magia de las conversaciones cruzadas y su efecto en la realidad de cada uno… sí, la frase de Hopkins te remueve por dentro. El personaje es un tipo que como él dice se dedica a almacenar datos e información durante toda su vida, no es especialmente creativo (dice él). Le hace falta una situación adversa y muy primaria (enfrentarse a la naturaleza) para convertir todos esos datos en conocimiento y, por tanto, en aprendizaje. Y ahí enlazo con el post que comentáis en el que dice que «La piedra angular en cualquier proceso de cambio es el tratamiento que se le da a la información» y sumaría ahí la actitud, ya que, como bien decís, el personaje se empeña en vivir y pensar continuamente… pues gracias por la recomendación!!

    1. Me alegra que te gustara! 🙂

      Yo soy/era más de libros pero tengo la suerte de tener a Iago como recomendador de pelis y series (a la carta) y es una suerte, porque todo tiene su punto. Ahora cuando estoy viendo alguna es muy habitual que pare para anotar una futura captura que aparecerá en algún post.

      Estoy de acuerdo en que es fundamental la actitud, yo diría que incluso más que la cantidad de información o el tratamiento que se le da porque creo que las conexiones surgen mejor cuando no se categoriza o etiqueta de forma rígida. Pero teniendo en cuenta que lo tuyo es la «innovación relacional», seguro que tienes mucho que decir. Un placer este inicio de conversaciones cruzadas. Me verás por allí a menudo. Gracias Laura!

  4. ‘Al carecer de la capacidad, el coraje y las armas para embarcarse en el viaje del aprendizaje, las personas pueden verse forzadas a encerrarse en cualquier leve fuente de seguridad en el presente.’

    Tampoco creo que hay que ser extremos, sino que hay posibilidades de puntos medios, que hay opciones que no excluyen porciones de ‘coraje’ y de ‘seguridad’, ¿no? Lo digo por una parte porque mucha gente que predica el coraje, la valentía, la fuerza del emprendizaje… ¡lo hacen desde una cátedra! (literalmente), y eso me produce una cierta distancia ante los teóricos faltos de pisar el mundo terrenal y un tanto ahítos de complacencia. Y por otra, porque no todas las psicologías y educaciones son iguales, y a veces incluso el consejo puede ser erróneo.

    1. Umm, creo que expresas perfectamente como se construye la paradoja: sobran desarrollo teórico sobre el pasado (haz lo que yo digo pero no lo que yo hago/he hecho) pero faltan herramientas reales para “embarcarse en el viaje del aprendizaje”. La frase que tú destacas es inseparable de la que le precede: «Cuando las personas no se sienten equipadas para comprometerse con la complejidad, optan por cierto tipo de autoprotección».

      Pero esto lo estamos viendo por todas partes, ¿verdad? El problema ya estaba ahí y ha contribuido a esta situación económica y socialmente insostenible. Decía Albet hace no mucho que «hemos pasado la economía productiva a la economía de consultores». Yo añadiría que ante la incertidumbre no sólo no desaparecen los gurús sino que surgen otros nuevos por todas partes.

      Con respectro a la educación, me quedo con lo que dice Sugata Mitra: “El estímulo parece ser la clave: No se puede hacer que el aprendizaje ocurra. Se trata de dejar que suceda”. O con lo que decía Federico Lupi: “Despierten en sus alumnos el dolor de la lucidez. Sin límites. Sin piedad”

      De todas formas, intuyo que hay mucha experiencia de los últimos meses en tus palabras y que avanzas a pasos agigantados construyendo experiencia, además de los conocimientos que ya tienes. Ahora que no nos oye nadie, te diría que el personaje de Hopkins, con sus inmensos conocimientos, me recuerda mucho a ti 😉

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