Por otra parte, los «felices 20» no han empezado muy lucidos que digamos, pero solemos decir que a la tercera va la vencida. En todo caso, con tantas piezas descolocadas (por decirlo suavemente), hay razones para el optimismo: tenemos un GRAN margen de mejora.
¿Y por qué este año sí? Pues porque me ha motivado el vídeo que ha preparado Iago en nuestra actividad asociativa, que compartimos con personas extraordinarias, y en la que aportamos lo que podemos con nuestra firme creencia en la cultura como herramienta de transformación. Porque, como decimos allí…
Nuestra convicción es sincera…
Que algo sea una excepción, no implica que sea excepcional, sino simplemente, que encierra una oportunidad.
Pues eso, transformemos los buenos deseos en objetivos y vayamos paso a paso, día a día para conseguir un buen 2023 🙂